El Equipo Regional de Monitoreo y Análisis de Derechos Humanos en Centroamérica, conformado por organizaciones comprometidas con la defensa de los derechos humanos, el Estado de Derecho y la justicia social, condena la forma arbitraria en que fueron destituidos los magistrados de la Sala de lo Constitucional y al Fiscal General de la República, en la primera sesión plenaria de la Asamblea Legislativa de El Salvador, realizada el 1 de mayo del presente año, lo que pone en riesgo la institucionalidad del país ante la intensión del Ejecutivo de controlar de forma autoritaria los Poderes del Estado. Por tanto, el Equipo Regional expresa que,

1) La Asamblea Legislativa de El Salvador debe actuar bajo la separación e independencia de poderes, en este caso no debe verse influenciada por los intereses del Ejecutivo. A pesar de su correlación política 2021-2024. La ruptura del orden constitucional provocado por el Congreso bajo las órdenes del Presidente de la República solo traerá al país una crisis social y política insostenible, afectando al pueblo salvadoreño.

2) Es primordial que se respecte el debido proceso para no poner en riesgo el Estado de Derecho de un país lacerado por la corrupción e impunidad. Por ello, es importante que se respecte la sentencia emitida el 1 de mayo de 2021, de la Sala de lo Constitucional que declaró inconstitucional la resolución de la nueva Asamblea Legislativa.

3) La democracia de un país se fortalece mediante la separación de poderes, el diálogo, la transparencia y respetando el orden constitucional.

4) El Ejecutivo debe actuar conforme a lo establecido en las normas y principios constitucionales y los principios del derecho internacional para no socavar la democracia en un país que continúa arrastrando las consecuencias de una guerra civil y que lo único que provocarán sus exigencias o caprichos será llevar al país junto con todos los salvadoreños a una profunda y terrible crisis social y política.

5) La legitimidad es importante no solo para elegir a los gobernantes y altos funcionarios, sino para que esta se realice mediante un ejercicio coherente con la democracia, con la transparencia, el respeto a los derechos humanos y el libre ejercicio de cada uno de los órganos del Estado para desempeñar sus funciones de acuerdo al mandato de ley.

Hacemos un llamado a la comunidad internacional a tener la mirada puesta en El Salvador a raíz de estas claras acciones de autoritarismo, que lo único que buscan es llevar al país centroamericano a una crisis política-social insostenible. Ejemplos hay muchos en la región desde Honduras, Guatemala y Nicaragua. Los resultados son devastadores, violaciones a los derechos fundamentales, sistemas democráticos colapsados por los constantes abusos de poder por parte del Ejecutivo, corrupción, impunidad, crisis económica, migración, entre otros. 

 Centroamérica, 4 de mayo de 2021