Una vez más el Ing. Agustín Jarquín Anaya ha tenido la necesidad de recurrir ante el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos denunciando las amenazas y la persecución política de la que es víctima después que el Consejo Supremo Electoral ilegalmente lo destituyera de su cargo como  diputado, arrogándose  funciones que no le corresponden. 

Jarquín recordó que es la cuarta vez que asiste al CENIDH, después que en 1995 sujetos no identificados hicieran varias detonaciones de armas de fuego frente a su casa de habitación, cuando desempeñó el cargo de Contralor General de la Republica y fue objeto de una trama política que lo llevo a la cárcel. Esta vez, por esta resolución con el que CSE en violación a sus derechos le despoja de su cargo de diputado.

En la resolución del CSE, el diputado Jarquín es señalado de traicionar a los electores y de desestabilizar la bancada de la Alianza Sandinista, dos criterios considerados muy fuertes para el diputado, más aún cuando fue una decisión de los Magistrados electorales que notificaron la suspensión de un cargo de elección popular sin antes hacer ningún tipo de investigación, ni procedimiento, sin estar facultados por la Constitución, ni por la Ley Electoral ni otro cuerpo jurídico para suspender o anular la credencial de un diputado, procedimiento y facultad exclusiva de la Asamblea Nacional.

Jarquín explicó que el sábado 3 de agosto, mientras se encontraba en la gasolinera Puma de Plaza Inter con el Pastor Úbeda, llegaron dos sujetos a tomarle fotografías e incluso preguntaron directamente el nombre a su acompañante. Según Jarquín, su conductor logró tomar fotografías de uno de los individuos mientras esté lo abordaba, reconociendo también al otro sujeto como un ex policía y miembro de la seguridad del Aeropuerto.

Jarquín también manifestó que en plena vía pública, al día siguiente, un carro color azul, Toyota Yaris, se aparcó junto a su vehículo, su conductor lo insultó culminando con “la vas a pagar”, hecho que no considera desvinculado al señalamiento de “traidor” que le ha imputado el CSE, lo que dice lamentar por que ha creado zozobra en su familia.

La Dra. Vilma Núñez de Escorcia, Presienta del CENIDH expresó que realizaran las acciones necesarias para que la Policía Nacional garantice la seguridad del Ingeniero Jarquín y su familia, aseguró que  solicitará directamente a la Primer Comisionada Aminta Granera un impulso serio de investigaciones sobre las amenazas y persecución que denuncia el diputado Jarquín, además el CENIDH realizará un estudio a fondo sobre las arbitrariedades y violaciones de derechos humanos constitutivas de delitos que ha cometido el Consejo Supremo Electoral.